Plagas de insectos en verano

Cuando llega el verano siempre lo asociamos al calor y vacaciones. Es una época de descanso y relax que nos sirve para cargar pilas para el otoño. Por desgracia no todo es perfecto y es la estación predilecta para los insectos. Mosquitos, hormigas, cucarachas… es cuando más detectamos su presencia y cuando las empresas de control de plagas realizan más trabajos de fumigación. ¿Por qué vemos más insectos durante esta época del año? ¿Cuál es la razón de su presencia?

Los insectos son animales de sangre fría por lo que dependen de la temperatura exterior para sobrevivir. Son incapaces de regular su calor corporal, por eso en invierno su presencia disminuye considerablemente.

Además se debe tener en cuenta que las altas temperaturas hacen que el metabolismo de los insectos se incremente y su crecimiento sea más rápido. Está demostrado que a partir de los 28-29 grados su reproducción se multiplica pudiendo afectar a locales comerciales, comunidades de vecinos o viviendas. Los expertos estiman que de abril a junio son los meses más importantes para hacer frente a los insectos. Realizar unas labores de prevención es la mejor herramienta para evitar la invasión de cucarachas, hormigas etc. De hecho, se estima que el trabajo de las empresas de control de plagas puede incrementarse hasta un 50% durante los meses de verano. Este dato hace que sea más habitual de lo que creemos sufrir un problema de estas características.

¿Qué plagas son las más abundantes en verano?

Entre la gran cantidad de insectos que nos rodean en verano, es habitual que moscas, avispas, mosquitos… pululen a nuestro alrededor algunos cuando estamos al aire libre y otros en nuestras casas. Por suerte, este tipo de especies, en la mayoría de los casos, no suponen un peligro más allá de las molestias que causan.

Lo que si puede suponer un problema es la presencia de cucarachas. Esta especie puede transmitir enfermedades, más allá del repelús que dé. En comunidades de vecinos, así como en las calles la presencia de la cucaracha negra o la americana es la más habitual. Ésta accede por los desagües o por pequeñas grietas a nuestras instalaciones.

Por su parte, si hablamos de locales comerciales, principalmente la hostería, ahí la cucaracha alemana, también conocida como del café, es la más frecuente. Bares y restaurantes son los principales negocios que se ven afectados por la presencia de este insecto. Son lugares donde tienen fácil acceso a comida y agua, por lo que su presencia es habitual sino se efectúan las labores correspondientes.

Para evitar la presencia de este tipo de insectos, la limpieza es importante. Evitar restos de comida en el suelo es fundamental para impedir que tengan acceso a la comida. A su vez, también debemos impedir aguas estancadas y/o sellar las grietas que puede haber en cocinas y baños para evitar su acceso. De todas formas, ante el más mínimo indicio o avistamiento, el remedio más eficaz es ponerse en contacto con una empresa de control de plagas. Ellos analizarán la situación y establecerán un tratamiento eficaz para solventar la incidencia, de tal forma que tanto en tu comunidad como en tu bar estén libres de su presencia.