La UNESCO ha catalogado al parque Europa de Bilbao como un ejemplo de naturalización en un entorno urbano. El proyecto se ha llevado a cabo entre la UPV/EHU, Ingurugela y el Ayuntamiento de Bilbao y ha tenido como objetivo renaturalizar el estanque del parque, evitando la aparición de plagas.
Desde el consistorio bilbaíno han asegurado que los parques urbanos son un instrumento fundamental para fomentar la educación ambiental y potenciar la presencia de la naturaleza en la ciudad.
Con la naturalización de este entorno, no solo se mejora la calidad de vida de los habitantes de la villa, ya que pueden disfrutar del ocio, el deporte, los servicios culturales… sino que además pueden disfrutar de la naturaleza en esta zona de la capital vizcaína, gracias al estanque que se ha creado, ofreciendo un nuevo hábitat para aves, anfibios, insectos…
El proyecto de la renaturalización del parque Europa comenzó hace dos años, cuando el Ayuntamiento de Bilbao y la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) recogieron el reto propuesto por el alumnado de los 53 colegios de Bilbao, dentro del programa Educación Ambiental de las Agendas 21 Local y Escolar. En él, los alumnos pidieron que el estanque “tuviera ranas y sapos, anfibios en peligro de extinción” convirtiéndose en un objetivo principal el dotar de fauna a este enclave bilbaíno, evitando la aparición de plagas para no realizar tareas de fumigación y desinsectación.
El parque Europa fue inaugurado en 1988 y abarca unos 107.000 m2 distribuidos entre los barrios de Txurdinaga, Otxarkoaga y Santutxu. En él se encuentran paseos asfaltados, áreas verdes, esculturas… con el fin de dotar de una amplia zona verde a esta parte de la ciudad. Además cuenta con un estanque de casi 700 m2 que se ha convertido en el centro neurálgico del parque y que según el Ayuntamiento “es un espacio con un gran potencial para recrear humedales, avistar aves, observar insectos y mejorar el medio ambiente urbano”.
