Los avances tecnológicos están en todo tipo de ámbitos de la sociedad. Últimamente mucho se está hablado del Big Data y la inteligencia artificial para mejorar, no solo nuestra vida, sino las líneas de negocio de cualquier compañía. De hecho, este tipo de tecnología también ha llegado a las empresas de sanidad ambiental. Las últimas técnicas hablan del uso de la inteligencia artificial en el control de plagas ¿Cómo puede ayudar este aspecto en la realización de labores de desinsectación o desratización? ¿Se está empleando ya? ¿Cuáles son sus ventajas?
Se está apostando por este tipo de tecnologías con el fin de seguir las directrices europeas y confiar en unos tratamientos más eficientes y efectivos.
Con el empleo de hardware y software de última generación, las empresas de control de plagas están haciendo todo lo posible por predecir el comportamiento de ratas y cucarachas. De tal forma que permita reforzar las labores de prevención y predecir, gracias a una serie de informes, la forma de actuar de estas empresas.
Big Data en el control de plagas
En este tipo de ámbito es donde juega un papel crucial el Big Data y la inteligencia artificial. Estas tecnologías facilitarán la labor de los profesionales realizando una gestión más eficiente, reduciendo el tiempo de acción y en consecuencia el gasto económico. Además, se podrá monitorear las 24 horas del día, los siete días de la semana, de tal manera que el control será mayor y más exhaustivo.
Además, el empleo del Big Data posibilitará la obtención de grandes volúmenes de datos y analizarlos de forma sencilla agrupándolos por especie. Si a esto se le añaden otros parámetros, indispensables en este sector, como la humedad y la temperatura, podremos predecir y elaborar informes sobre la forma de actuar de un insecto o un roedor.
La obtención de esta información hará que las empresas de control de plagas puedan tomar decisiones de manera certera y decantarse por un determinado tratamiento que será más preciso y eficaz, ahorrando tiempo y costes.
Estas nuevas tendencias han venido para quedarse en un sector donde el empleo de productos químicos estaba a la orden del día. Ahora, entre la normativa europea y estas nuevas tendencias se podrán optimizar acciones y el tipo de tratamiento. Esto hará que las labores de desratización y desinsectación sean más eficientes y efectivas.
La digitalización ha abierto un campo enorme en el control de plagas y las compañías de sanidad ambiental, así como las instituciones locales, no pueden quedarse atrás en su empleo. Poder predecir el comportamiento de una determinada especie ayudará a los técnicos a establecer una serie de medidas que permitan solventar la incidencia y sobre todo que abarate el proceso.
