Dentro de las diferentes plagas que podemos sufrir en nuestro hogar siempre hablamos de cucarachas, termitas o ratas. Pero hay un insecto que casi pasa desapercibido y que también es muy común; las polillas. Una especie que se mete en nuestra casa y no nos damos cuenta hasta ver los estragos que ha causado. Si no queremos ser víctimas de ella, siguiendo estos simples consejos evitaremos la polillas en casa. Si ya es demasiado tarde, lo más aconsejables es confiar en una empresa de control de plagas para que realice unas labores de desinsectación.
Generalmente hay tres tipos de polillas que pueden afectarnos: la de la ropa, la de los alimentos y la de la madera.
Muchas personas confunden a las polillas con las mariposas, pero nada más lejos de la realidad. Son insectos que causan daños en nuestro hogar y que si sospechamos de su presencia, se debe erradicar con la mayor celeridad. En internet existen diferentes trucos sobre cómo eliminar polillas con remedios caseros, pero la única solución eficaz en confiar en profesionales.
Como hemos dicho unas líneas más arriba, habitualmente podemos encontrar en nuestro hogar tres tipos de polilla. La polilla de la ropa se alimenta de tejidos como la lana, la piel etc. Anidan en armarios y cajones y no nos damos cuenta hasta que vemos agujeros en ella. Otra polilla muy habitual es la de la madera. Muebles, ventanas de este material suelen estar entre sus platos preferidos. Por último se encuentra la de los alimentos, cuyas larvas se alimentan de comida seca como cereales, frutos secos etc.
¿Qué hacer para que no haya polillas?
Sufrir una plaga de polillas en casa no es un escenario muy grave, pero no resulta nada cómodo. Por eso las labores de prevención son la mejor herramienta para que no entren en nuestra casa y no se coman nuestra comida, nuestra ropa etc. Por suerte existen una serie de recomendaciones para impedir este hecho. Eso sí, si vemos que somos víctimas, la solución más indicada es ponerse en contacto con una empresa de control de plagas.
- Mantener los armarios y despensas limpios. Las polillas encuentran su alimento en áreas sucias de la casa.
- Revisar bien la ropa y asegurarnos de que esté limpia antes de guardarla. La ropa sucia es especialmente atrayente para este insecto. Se recomienda airear o agitar la ropa una vez al mes.
- Las polillas odian la luz, así que evita zonas oscuras o que estén mucho tiempo sin abrir.
- Prestar atención a alfombras y a la tapicería. Muchas veces relacionamos a la polilla con armarios y se encuentra en estos lugares sobre todo si están elaborados con lana.
Siguiendo estas simples recomendaciones nos ayudarán a evitar una plaga de polillas en nuestra vivienda. Si ya es demasiado tarde, la apuesta por empresas de control de plagas es la solución más indicada. Ellos sabrán detectar el origen del problema y establecer el tratamiento más efectivo para eliminar las polillas de forma eficaz y duradera.