¿Por qué el otoño para combatir la plaga de oruga procesionaria?

Una de las plagas más dañinas para los árboles que llenan nuestros bosques en la oruga procesionaria. Desgraciadamente es un problema muy habitual en el sur de Europa y todos los años sale a la palestra esta situación. ¿Pero sabías que el otoño es la mejor época para combatirla según las empresas de control de plagas? Te explicamos los motivos.

La plaga de oruga del pino no solo es peligrosa para este tipo de árbol. Personas, y sobre todo mascotas, también pueden ser víctimas de ellas por sus pelillos urticantes que causan reacciones alérgicas.

Así que si vamos a hacer senderismo y nos encontramos a esta especie, lo mejor es no hacerle caso y pasar de largo a fin de impedir que nos cause algún tipo de problema aunque no suele ser lo habitual.

Para entender los motivos por los que esta época es la mejor para combatir esta plaga, debemos tener en cuenta el ciclo de vida de la oruga. Este se compone de tres fases: fase larvaria, fase crisálida y fase de adulto que es cuando se convierten en mariposa en verano.

A finales de la estación estival, realizan la puesta de los huevos en los pinos de los que se alimentan en su fase larvaria. Tras este paso, los huevos eclosionan y las larvas se resguardan en invierno en las características bolsas blancas que seguro que hemos visto en más de una ocasión. Una vez pasado este periodo, las orugas empiezan a bajar en procesión por el tronco del árbol hacia el suelo esperando a transformarse en mariposa.

¿Por qué el otoño para combatir la plaga de oruga procesionaria?

Cualquier época del año es idónea para combatir a la oruga procesionaria. Los avances técnicos como la endoterapia vegetal permiten realizar campañas a lo largo del año. Pero si queremos comenzar a tratarlas, las empresas de control de plagas recomiendan esta época que es cuando las larvas son pequeñas y por tanto más débiles.

Además, con estas medidas se evitará que el gusano llegue al suelo y pueda convertirse en una situación peligrosa, ya que es cuando el ser humano, sobre todo niños, y los animales domésticos pueden tener contacto con esta especie.

La endoterapia vegetal consiste en “vacunar” a los árboles con una sustancia nutritiva o fitosanitaria. Este producto se transmitirá por toda la planta gracias a la xilema, efectuando un efecto insecticida y fungicida. Se trata de una técnica segura y ecológica y una alternativa a los tratamientos químicos tradicionales.

Como empresa de control de plagas, empleamos técnicas novedosas a la hora de hacer frente a tratamientos de desinsectación y desratización. Queremos colaborar en lo máximo posible con el medio ambiente y por eso tratamos de evitar el uso de biocidas y fumigaciones apostando por métodos sostenibles sin perder ningún tipo de eficacia.